México es el primer país en abuso infantil y en acoso escolar, situación que concierne y afecta a todos, en especial a los menores. Estos niveles de violencia se pueden prevenir, impartiendo actividades de educación y concientización en niños y padres, sobre qué hacer ante un evento de maltrato, así como reconocer señales y ejecutar acciones para prevenirlo. Además la atención a la salud emocional es fundamental, para promover estrategias y herramientas que permitan a los padres y niños, saber reaccionar y enfrentar una situación de violencia.